lunes, 30 de marzo de 2009

Los Arribes del Aljucén
( domingo, 29 de marzo de 2009 )

Participantes de la ruta.

Florencio Benítez-Cano Benítez-Cano.

Asistentes a la ruta:
Moisés López
Andrés Nieto
Alberto López
Juan Carlos Muñoz
Juan Luis Capilla
Pablo Gallego
Florencio Benítez-Cano
Pablo Carrascosa
Jesús Beltrán Simón
Emiliano Andrade
José María Garrido
Pedro Cuesta Flores
Juan Manuel Barroso
Paco Cidoncha
Gerardo Muñoz
José Carlos Escobar
José Joaquín Gallego

Los invitados:
Juanjo Rodríguez
Manolo Porro
Juan Sauceda
Pedro de Jorge
Juan Sánchez Porro
Antonio Romero
Andrés Nieto ( padre )

Domingo, 29 de marzo de 2009
Tiempo empleado: 3 h. 13 m.03 sg.
Velocidad Máxima: 42,1 Km/h.
Velocidad Media: 16,8 Km/h.
Parciales: 54,35 Kms
Odómetro: 859,100 Kms.
Totales: 859,100 Kms.

Recorrido: Plaza de España, Carretera EX - 106, Huerto Juárez, Don Rodrigo, Las Monjas, Canal de Orellana, Pista de la Parrilla, Castillejos Reunidos, La Cuesta Infernal, Cordel, Camino de los Eucaliptus, Arribes del Aljucén, Camino de Valdelasyeguas, Castillejos de Abajo, El Entalle, Camino de Cuadradillo, Canal de Orellana, Cruce del Sajonia, Carretera de Cáceres, Plaza de España.
©Florencio Benítez-Cano Benítez-Cano
Santa Amalia (Badajoz)
Marzo de 2009

Comentario
"En uno de los repliegues de ese terreno
se ocultan los hondos tajos,
las encrespadas gargantas,
los imponentes cuchillos,
los erguidos esfayaderos, bajo los cuales,
allá, en lo hondo, vive y corre el Aljucén."

Don Florencio Benítez-Cano
[1]

Recorrido nuevamente con nombre propio, esta vez de río, el Río Aljucén, que aunque a todos nos suena allá por la población pacense de Aljucén, al pie de la Nacional-630, mal llamada también Vía de la Plata[2], la verdad es que dicho río nace en la provincia de Cáceres, recogiendo sus primeras aguas por estas sierrucas de los alrededores de Arroyomolinos de Montánchez y de Alcúescar.
En su cauce medio alto estuvimos parados, admirando sus cristalinas aguas, y posiblemente algunas pardillas o sucedáneos de ellas, y admirando la frondosa vegetación de sus riveras, donde predominan los frondosos fresnos y los álamos negros. Y donde estuvimos haciendo unas fotos para el recuerdo y también reponiendo energías, que a duras penas, pude conseguir que fuera en este hermoso lugar, pues mucho antes, cada vez que hacíamos una parada para reagruparnos, no faltaba alguien que insinuara que si aquel lugar era el idóneo para tomarse las barritas energéticas y otras putaditas manchegas.

Una nueva edición también de estos recorridos cicloturistas, de la ya formalizada Peña Ciclista Amaliense, aunque algunas personas se resisten a pronunciar su primitiva denominación, de cuyo nombre no quiero acordarme, como diría Cervantes, para no caer en la nostalgia de su recuerdo. En otra ocasión, bajo la dirección de Flore, habíamos intentado hacer esta ruta, pero no se siguieron las advertencias oportunas y terminamos saltando vallas y subiendo tremendas pendientes. En esta ocasión tampoco se han seguido del todo las directrices del jefe de filas y a punto hemos estado de salirnos de nuevo de madre en un par de ocasiones.

Una nueva edición de estos recorridos, que son para todos y de todos, pero que no tengo más remedio que dedicárselo de una manera especial a mi sobrino Tato[3] por esa inyección de ánimo que me dio el viernes por la tarde, al verme por la calle Madrid, parar el coche y decirme, con voz enérgica y contundente como él acostumbra:
– No vuelvas otra vez a hacerme esto.
Yo, que en un principio no sabía por donde iban os tiros, me quedé un tanto extrañado, hasta que me dijo de nuevo.
– He estado todos y cada uno de los días de la semana esperando el comentario de la Rhjuta del pasado domingo. No me vuelvas a hacer esto nunca más. No me tengas en vilo tanto tiempo.

Una nueva edición de estos recorridos cicloturistas en los que nos acompañan los compañeros de Don Benito y Villanueva de la Serena, que ya es la segunda vez y no creo que sea la última, pues se nota que tenemos buen feelling entre nosotros, a pesar de que al amigo Juanjo le he usurpado a su administrativa, pero eso son cuestiones profesionales que no vienen a cuento. Su amigo Paco, mi compadre, vino a la plaza, con su flamante moto, para saludarle y recoger un encargo. Manolo, por el camino, me recordó el lugar y el tiempo en que nuestras vidas se habían cruzado, que yo ya no me acordaba, pues fue hace muchos años en el Camping “Las Veguillas” del Valle del Jerte. Juan Sauceda me comentó que teníamos unos sobrinos comunes emparentados, Lidia y Angelito, por su parte y por la mía respectivamente, y creo que hay algo más. Antonio “Maderas” Romero, hombre muy prudente que avisa por dónde hay que adelantar, y que aceptó de buen grado la broma que le di al decirle que el casco sólo es para las personas que se caen de las bicicletas. De Pedro no sé que decir porque es más bien callado y prudente. Un hurra para el veterano del grupo, más por padre que por otra cosa, para Andrés, para el padre de nuestro endiablado Andrés Nieto Junior. Y por fin recordar que con Juanito Sánchez Porro, el amigo de Garrido, fui despachándome a gusto por aquello de que quiere hacer el Camino de Santiago, y tocante a ese tema, compañeros, se me disparan todos los sentidos del cuerpo.

Una nueva edición en que faltaron a lista, con aviso y justificaciones previas, algunos elementos importantes de nuestro grupo, Domingo que tenía un compromiso ineludible en su pueblo, Almoharín, por la historia de los quesos, y que vino a saludarnos y a despedirnos y hacernos la foto, y los hermanos “del Molino”, que lo sentirían en el alma, pero tenían que terminar un trabajo que tienen pendiente de entrega nada menos que en Pamplona, a menos que nos estén engañando y quieran ir a Navarra para empezar dese allí el Camino de Santiago. Ayer por la tarde, cuando pasé por allí, estaban atareados con su faena, más no les quise entretener y continué el camino.

Una nueva edición por fin de un recorrido precioso, algo más largo de lo corriente, y en la que no faltaron los entuertos, que se solucionaron con la pericia de los expertos del grupo. Pinchó Lalo, el primero, en las primeras matas, a la altura de la “Casa de la Señora Condesa”, la Casa de Bonilla. No pudimos atrochar por los Castillejos Reunidos, pues estaba cerrada la verja con un buen candado, y tuvimos que dar la vuelta por la Cuesta Infernal. Alguno se alegraría, y yo tuve la suerte de que Carrascosa fuera delante de mí. Por el camino de los eucaliptos a punto estuvimos de equivocarnos otra vez, pues ya iban algunas personas ciegas a bajar por el mismo sitio, cuando escucharon las voces de Flore:
OOTRAAA VEEEZ…OOTRAA VEEZ….OOTRA VEEZ…
Más tarde, en el camino de regreso, pincharía de nuevo Pedro Cuesta, casi al mismo tiempo que a su cuñado Alberto se le salía la cadena, y se le entrillaba ente los piñones, viéndose negra para sacarla, por lo oído no tenía cojones para sacarla y se tuvo que agarrar a una piedra, que sí os tendría. Y llegados al Cortijo de Valdelasyeguas, uno de los tres que hay por el entorno, se le rompió la cadena a Juan Carlo Nieto, pero también se solucionó el problema y pudimos cantar victoria. Poco después nos cruzamos con un todoterreno que se paró a saludarme, era Jerónimo, el encargado de aquella finca, al que yo había referido momentos antes que conocía ya de varias ocasiones anteriores, de haber pasado por allí.

El resto del camino, por terrenos ya conocidos, y sin tener que seguir las indicaciones del jefe de filas, se hizo muy bien pues cada cual campeó a su gusto, pero por fin, al llegar a la piscina todo el mundo esperó para reagruparse y entrar todos juntos en el pueblo.

[1] "En uno de los repliegues de ese terreno se ocultan los hondos tajos, las encrespadas gargantas, los imponentes cuchillos, los erguidos esfayaderos, bajo los cuales, allá, en lo hondo, vive y corre el Duero"
Don Miguel de Unamuno.

[2] De los casi mil kilómetros que tiene la Nacional-630, desde Gijón hasta Cádiz, las dos terceras partes, aproximadamente, seiscientos treinta kilómetros, desde Sevilla hasta Benavente, son comunes, y por eso se la confunde. A partir de Benavente, la Vía de la Plata se va para la Bañeza y Astorga, enlazando así con el Camino de Santiago Francés, el que viene de Roncesvalles.
[3] Algunos se preguntará de dónde viene este parentesco o es simplemente una de mis bromas. El que no lo averigüe tendrá la solución en la próxima edición de estos comentarios cicloturistas.

3 comentarios:

  1. HE QUE PASO SOY JESUS PAULINO CAÑAMERO, Y NO PENSEIS QUE NO VOY A VOLVER A SALIR CON USTEDES, SI NO PUEDO ES PORQUE ESTOY MUY ATAREADO, EN CUANTO PUEDA UN DOMINGO VUELVO A ESTAR HAY AL PIE DEL CAÑON, OK VENGA NOS VEMOS.

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  2. vale muchachos, desde badajoz os doy los mejores deseos de que disfruteis de la experiencia que dar el ser libre con paseos en bici.

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  3. Saludos . Agustin. me gusta vuestra experiencia

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