miércoles, 27 de septiembre de 2017

REENCUENTRO EN LA CABRA






Track ruta:
Relive:
Fotos:

 Me comprometí la semana pasada hacer la crónica de esta  seguramente no sea el más indicado, pues no he tenido mucho roce con el protagonista de esta ruta que no es otro Javi     (Avería).
   Toca una ruta especial, no de esas que tenemos señalada en el calendario sino por el significado de la misma, la vuelta de Javi a la “cabra” después de mucho tiempo.                                              
      No podíamos faltar por la unión familiar que le une al ser  primo del Yanqui y por amistad con miembros de la peña con la que también ha salido en algunas ocasiones.



  Nos reunimos en la plaza, más o menos a la hora acordada durante la semana con vehículos para llevar todas las bicicletas de la peña.
    Salimos y nos dirigimos al  El cazador donde poco a poco se va juntado la gente , donde se une a nosotros David y Fátima .Sobre las  9h llega el protagonista del día ,bien acompañado por sus compañeros. 



A las 9 30 salimos por la carretera de Las Cruces la que pronto abandonamos para dirigirnos a la  izquierda por una pista polvorienta que será la tónica del día ,tragar polvo. Entre sube y baja acelerones y paradas hacemos los primeros kilómetros, dando un poco de alegría y colorido a un campo que muestra la gran necesidad de agua que tiene.


  Así poco a poco y casi sin darnos cuenta vamos cambiando tierras de labranzas y olivos por alcornoques y encina, llegamos al puente, La Pared donde hacemos una pequeña parada para descansar un poco porque estas cosas hay que tomárselas con calma y todavía queda lo más duro. 



 _De aquí en adelante la pista se convierte en menos transitables y más desnivel, piedras sueltas y trampas de arena, si para nosotros es dificultoso imaginaros para Javi y sus compañeros que no le dejan de empujar y alentar en ningún momento.

   Una vez en las primeras rampas paramos para organizar la subida que consiste ir adelantándonos un poco e ir dándole unos empujoncillos en las rampas más difíciles y sea  más llevadero para todos, así vamos avanzando hasta un falso llano donde descansamos, otro poquillo para recuperar fuerza para el último tramo hasta la caseta, una vez llegado a esta se ve con fuerza y decide subir los cerca de 2 kilómetro que nos separan de la torre de vigilancia donde termina el camino, pues allá que vamos nos adelantamos a Javi para darle el recibimiento que se merecía en la cumbre,  con un pasillo improvisado y entre aplauso, por fin había vuelto a la cima que tantas veces  ha subido y con una sonrisa que parecía decir aquí estoy otra vez, misión cumplida.







    Allí nos esperaban con un avituallamiento, que alguno se perdió ¿verdad Paco ? Mira que segar en domingo, si llegas a estar sobran menos dulces. Después de unas palabras que le de dedico su hija y la foto de rigor con el protagonista del día  volvemos para casa ya cada grupo por  libre, ya que Javi la vuelta la hace en coche, por el esfuerzo realizado y por la dificultad de la bajada.

    Después de unos momento de titubeo, por el camino debe  seguir la peña de vuelta  a los coches ,nos decidimos por el camino que bordea las minas del Lobo y va a la ermita de la Antigua patrona de La Haba. 


Ya en terreno más favorable casi siempre de bajada pasamos por el puente de La Antigua  desde aquí por la carretera vieja a la nueva de Quintana   por ella y con buen pedaleo  hasta Don Benito. Donde llegamos sobre las dos con 53 Km. a la espalda y con el deber cumplido.
   Desde aquí a la sede llenos de polvo unas cervecita y para casa. 

  No lo iba a contar pero me lo iban a echar en cara, hubo otro protagonista en la ruta más a su pesar el chino y su specialized que en la ultimita pedalada que dio para llegar a la torre le hizo un corte a la cubierta y ni tubeless ni no tubeless  reventón, ya sabemos como se pone el chino y la lata que le da Javi, entre risas, mosqueos y alguna broma ponemos la cámara y arreglado.




   CHINO NO PODRAN CON NOSOTROS!!ARRIBA SPECIALIZED!!

   Aquí lo sucedido hasta la próxima. 
Crónica Javi Camacho


martes, 19 de septiembre de 2017

RUTA AL YACIMIENTO TARTÉSICO LA MATA


Participantes:
Capilla
Carrascosa
Toni
Diegui
Tomas David
Pedro Carrasco
Javi Camacho
Paco
Cidoncha
Juan
Ismael
                Hoy toca madrugar para ir a Campanario, ruta programada hace varias semanas y que no se pudo realizar por motivos ajenos a nosotros.
Entramos ya en el tiempo de que no sabemos que ponernos, porque a primera hora hace frío pero una vez va transcurriendo la mañana va sobrando ropa.
Antes de salir compruebo que hace freso y me pongo manguitos y perneras, espero a mi primo Diegui y nos vamos hacia la Plaza. Al llegar solo me encuentro a tres Perrigalgos, pero van llegando poco a poco, hasta llegar un total de nueve, más Toni que nos espera en Medellín.
Una vez  llegados los cuñados, salimos puntuales y esta vez tiramos por la calle San Juan para recoger a Capilla que iba muy fresco y se adelantó a poner algo de ropa, los demás iban bien abrigados ya con la chaqueta de invierno como Don Pedro. Tiramos dirección Medellín con fresquito, allí estaba esperando Toni, seguimos hasta Don Benito, cogemos la carretera hacia La Haba a un ritmo tranquilo, la gente está arrecida, llegando a La Haba me pasa Tomas David la cámara, que dice que él no quiere cargos. 


Llegando al pueblo cogemos un camino a la izquierda y aquí paramos, nos aconseja Pedro que a partir de aquí va sobrando la ropa, porque viene un par de kilómetros de cuestas, así pues la gente empieza a desplumarse. Dicho y hecho, cruzamos la carretera de Quintana y empezamos a subir como siempre cada uno a su ritmo hasta un cruce de caminos donde hay que girar a la izquierda, aquí el GPS Don Pedro  no lo tiene claro, hasta que se resetea y continuamos rodeando Magacela pasando por el cementerio hasta llegar a una carretera.
 Aquí empieza el día negro de Capilla, porque se da cuenta que ha pinchado, mientras lo arreglan yo aprovecho y voy a fotografiar el dolmen que está a unos metros. Una vez arreglado el pinchazo, seguimos por la carretera unos poquitos metros y giramos a la izquierda por una pequeña aldea que está a la falda de Magacela, la atravesamos para continuar por una pista asfaltada que nos lleva casi hasta nuestro destino, después de unos cinco kilómetros, sale un camino señalizado, indicando  que quedan dos kilómetros hasta el yacimiento de La Mata.



Por este camino de tierra, que al final hay una cuestecita que se las trae, van subiendo uno a uno, una vez todos allí, hay un chaval esperándonos al que le sorprende nuestra puntualidad, eran las 10:10, creo recordar. Una vez que estamos todos juntos, empieza a explicarnos la historia de los yacimientos, de pronto llaman a Capilla al móvil y se tiene que ir, cuando echa  mano a la bici se da cuenta de que  vuelve a estar pinchada, vaya día, la arregla mientras a nosotros nos enseñan  los yacimientos tartésicos. Capilla, finalmente, se va, ha quedado con su mujer para que venga a por él.









Una vez terminada la ruta por los yacimientos, nos hacemos la foto de rigor y aprovechamos para comer un poquito en un “Plis-plas” pues llevamos una hora allí y tenemos que volver.  Deshacemos lo andado y nada más salir Pedro se lleva un buen susto, le salta la cadena y a punto estuvo de caerse, eso sí, se llevó algún arañazo que otro. Seguimos por el mismo camino pero en vez de tirar dirección La Haba, seguimos hacia Villanueva por el mismo camino, aquí empieza el viacrucis de Ismael, con el tío de la marra que le dio de lleno.


Por fin llegamos a Villanueva, y ponemos dirección a Don Benito, por la carretera pasando por el Hospital, hasta la rotonda para girar a la derecha hacia el cementerio. Cogemos la antigua carretera, pasando por la rotonda del Tordo y de aquí al Río Guadiana, una vez allí cogemos un camino que nos llevará hacia la Nacional 430 a la altura de Ruecas, dejamos a la izquierda dos eucaliptos, que según Pedro son los más antiguos de Extremadura. Por aquí ya vamos más tranquilos, pero a Ismael le ha dado el de la maza bien dado.


Cogemos la Nacional antes de llegar al río y ya la altura del cementerio la dejamos, para tirar por una pista hasta Hernán Cortés, aquí se queda Toni y continuamos hasta Santa Amalia, a un ritmo tranquilo para llegar todos juntos y con 83 kilómetros a la espalda, ya en Santa Amalia como de costumbre parada en el Bar de Moniato, para tomarnos la cervecita que entra de vicio.
Hasta la próxima!!!

Un saludo, Juan.


martes, 12 de septiembre de 2017

SIN COMERNOS EL MAGÍN, NOS ESPETAMOS A LA PRESA DE ALCOLLARÍN






Track ruta:
Datos ruta:

1-Volvemos al horario habitual de las nueve sin hacer concesiones, Pedro Roni, con buen criterio, nos tacha de camastrones.
2- Cuando llegan los calores la familia perrigalguera se encuentra en un brete; en esta ocasión no nos juntamos cuatro gatos, sino siete.
3-  A la sempiterna pregunta de ¿adónde vamos?, me adelanto en el ínterin. “Si queréis yo puedo llevaros a la presa de Alcollarín”.

4- Son ochenta kilómetros de pedaleo y nos espera una somanta; así que a las nueve y diez nos subimos a las burras y “carretera y manta”.
5- Pasamos por Valdehornillos, Vivares y Casar de Miajadas, pedaleando como fieras; Tite comenta con sorna: “Vamos a llegar antes que las “viajeras”.
6- Torcemos a la izquierda y Tomás Davis nos come el tarro. Pregunta: ¿Qué pueblo es ese? “Cual va a ser: Pizarro”.

7- Un poco más adelante alguien grita: ¡Avería! Es Diegui que ha roto el cable del cambio. ¡Quería darnos el día!
8- En la parroquia de Campo Lugar donde se venera a Nuestra Señora de los Ángeles, nos detenemos. Es Tite el que dice: “Retrátala Javielillo, que esta no la tenemos”.





9- Comemos en un mirador con bonitas vistas del pantano. Tite posa cual águila rampante, haciendo un esfuerzo sobrehumano.



10- Javielillo solicita un cronista en lo que es ya un fatídico lance. Como ponedor de la ruta y ofrecerme voluntario, heme aquí en este trance.
11- Por debajo de la presa hay unas construcciones antiguas. Son bujios, chozos, cabañas y pozos, rescatados de las aguas.













12- Soplando el viento de cara, pedaleamos muy aplicados. A la derecha nos ve pasar, con desdén, un bando de buitres leonados. 



13- Los más fuertes dan los relevos, y Diegui y yo “ni estamos ni se nos espera”. A Tite le veo muy fino: se está subiendo a la higuera.
14- Entre Escurial y Miajadas una pareja arrastra una maleta con cierta “priesa”. Alguien comenta con guasa: “Irán a coger la Tallesa”. 

15- Por la pista del canal vemos a lo lejos un grupo de gente apiñadas como champiñones. Al llegar nos damos cuenta que han pinchado Los Jarones.





16- Arrancamos con nuevos bríos y rodamos a todo trapo hechos un ovillo. Sin darnos cuenta y en un plis-plas llegamos a Valdehornillo.

17- Y a la una menos cuarto, y sin cobrarle a Juanlu ni un kilómetro de IVA, llegamos ancá Moniato sin más tela que cortar ni diatriba.
Hasta la próxima, “correliebres”
Crónica Pedro Carrasco Cuesta