Ya me iba tocando la crónica y me toco y por
imposición directa y sin rechistar así que
manos a la obra.
Todavía no son las 8 y ya se oye ruido en
la habitación de al lado , no es otro
que Paco ,parece impaciente por salir a dar pedales y eso que hasta las 9 no
nos abren el comedor para el desayuno.
Me levanto , me asomo a la puerta ya con los
avios puestos como quedamos la noche anterior
Hace un día buenísimo sin nubes ,ni aire , con buena temperatura y
viendo el terreno por donde nos íbamos a mover era mejor no abrigarse mucho.
Después de meternos las tostadas entre
pecho y espalda cojemos las monturas ,hoy con una nueva incorporación , Pablo jr estrena maquina una Megamo de carbono 29
preciosa, a disfrutarla campeón.
Nos disponemos a salir pero algunos
problemillas con la GO PRO de Jesús ,nos hace entretenernos un poco, la cual nos daríamos cuenta mas adelante que
no tenia batería a si que sin video.
La ruta marcada es la del año pasado, que
con la nieve no pudimos completar . Nos ponemos en marcha y nos dirigimos al
primer destino del día, el embalse de
Navalmuño por una bajada y una subida que el año pasado tuvimos que hacer
andado y este año sin problemas, se ve en el embalse la escasez de lluvia
de este año, aunque ahora tiene que recoger agua de la
nieve.
Tomamos la pista asfaltada que nos lleva a Candelario a mitad de esta al
atravesar un puente, y después de unos momentos de titubeo decidimos tomar un camino a la derecha que no tiene mala pinta, sin tener mucha idea
donde puede llegar. Llevado unos metros y dejado atrás algunas cancelas nos
encontramos con dos ciclistas de Bejar a
los que preguntamos por un camino que nos lleve a la carretera de las
plataformas y después de algunas indicaciones y despedirnos seguimos a nuestro
destino ,un camino sinuoso que siempre va picando para arriba, con grande
rampas y falso llanos, rodeados por un
bosque de robles y con un arroyuelo que nos acompaña gran parte de la subida,.
Poco a poco vamos cambiando los robles por pinos, donde se nos acaba la ascensión
y no tenemos elección que seguir para abajo entre los pinos hasta llegar a un
arroyo que cruzaremos ,otra vez para
arriba en busca de la carretera ,un poco mosqueados porque no hay rastro de
ella ,después de unos metros entre el pinar nos damos con ella justo donde nos
indicaron ,en una curva por encima del secadero de jamones.
De aquí para adelante ya es conocido es lo mismo del año pasado apretar el culo y para lante, curva a curva y rampa a rampa ,Pablete tira primero el lleva otro ritmo y con la bici nueva va como un tiro y eso que dice el padre que se tiene que hacer a ella ,yo creo que ya se ha hecho. Al poco tiempo sale Pablo a por el, pero no le pillaría. Los demás nos mantendríamos juntos a nuestro ritmo tranquilitos que todavía queda tela. Llegado a la primera plataforma nos damos cuenta que no hay nadie ,ni nieve y decidimos subir a la segunda que es a donde suben los coches que no dejan de adelantarnos durante todo el camino, no sin antes pararnos a comer algún plátano. Una vez puestos en marcha y a mita de camino entre las dos plataformas va bajado Pablete que se une y vuelve a subir con nosotros, mas arriba su padre haría lo mismo y se uniría al grupo. Por fin entre gente andando ,coches en la cuneta y nieve llegamos a la segunda plataforma a 1860 metros .
Después de las fotos de rigor y abrigarse un poco tiramos para Candelario ,ya mas llevadero pero con su peligro que no deja de ser una carretera estrecha ,con muchas curvas y los coche siguen subiendo. Ya en el pueblo hacemos un poco de turismo sobre rueda y para Bejar que todavía queda algunas subidas y con las piernas frías, auque son cortas se hacen largas .Y la llegada al albergue con unos 1000 de desnivel acumulado y 35 kilómetros completitos como dice Nico con la sensación térmica de 60 kilómetros, a las duchas , cervecitas y a descansar.
De aquí para adelante ya es conocido es lo mismo del año pasado apretar el culo y para lante, curva a curva y rampa a rampa ,Pablete tira primero el lleva otro ritmo y con la bici nueva va como un tiro y eso que dice el padre que se tiene que hacer a ella ,yo creo que ya se ha hecho. Al poco tiempo sale Pablo a por el, pero no le pillaría. Los demás nos mantendríamos juntos a nuestro ritmo tranquilitos que todavía queda tela. Llegado a la primera plataforma nos damos cuenta que no hay nadie ,ni nieve y decidimos subir a la segunda que es a donde suben los coches que no dejan de adelantarnos durante todo el camino, no sin antes pararnos a comer algún plátano. Una vez puestos en marcha y a mita de camino entre las dos plataformas va bajado Pablete que se une y vuelve a subir con nosotros, mas arriba su padre haría lo mismo y se uniría al grupo. Por fin entre gente andando ,coches en la cuneta y nieve llegamos a la segunda plataforma a 1860 metros .
Después de las fotos de rigor y abrigarse un poco tiramos para Candelario ,ya mas llevadero pero con su peligro que no deja de ser una carretera estrecha ,con muchas curvas y los coche siguen subiendo. Ya en el pueblo hacemos un poco de turismo sobre rueda y para Bejar que todavía queda algunas subidas y con las piernas frías, auque son cortas se hacen largas .Y la llegada al albergue con unos 1000 de desnivel acumulado y 35 kilómetros completitos como dice Nico con la sensación térmica de 60 kilómetros, a las duchas , cervecitas y a descansar.
Que buen día pasasteis, sin frio y casi ni nieve...
ResponderEliminarBuena crónica Javi, se ve que te encasquetaron la crónica y te entró el calor porque si no no me explico ir a la covatilla con ropa de verano...