Domingo 20 de mayo 9 de la mañana, 12 perrigalgos y dos
perrigalguillos (Pablo jr. y Jesús) nos congregamos en la plaza para dar rienda
suelta nuestras ganas de cicloturismo y pasar un buen rato con los compañeros
de la peña. Hoy nos acompaña Manolo Cordero recién iniciado en el mundo de la
bici. Al llegar a la plaza veo a Paco Demontre con un especial atuendo campero,
que trae a su pupilo para que nos acompañe éste a la ruta de hoy. Bueno pues,
dicho ésto se debate sobre donde ir, ya que hay considerables bajas por que
Javi, Germán, Pedro Cuesta, Aparico, Don Pedro y Triki van de camino a
Guadalupe, unos a hacer ida y vuelta y otros a volverse a mitad de camino.
También por otra parte mi compadre Domingo jr. se encontraba en Deleitosa a
correr una maratón mtb acompañado por su padre y Mario con otro grupo están por
el norte de Cáceres a hacer otra carrera. Otro hay por ahí que se ausentó, y
según se ve, estaría de celebración la noche anterior. (Prohibido hablar de
futbol…) Capilla comenta de ir a cuatro caños por la finca del huevo. No se
hable más. Dicho ésto no montamos en las burras y “uñas al guarro”, bajamos la
calle de los muertos y ponemos dirección a la piscina, llegado a la pista del
campo de fútbol cogemos ésta, y nos dirigimos hacia el matadero, que nos
adentramos por el camino de la depuradora, para mí antiguo camino de “las
prácticas”.
Aquí es donde me emparejo con Manolo y me comenta la caída de su
cuñado Lemos, que desde aquí aunque no frecuente nuestro blog, me gustaría
mandar ánimos y una pronta recuperación. Charlando y charlando llegamos a la N
430, ponemos rumbo hacia Torrefresneda, seguimos dirección San Pedro de Mérida
por la vía de servicio izquierda de la autovía, cruzamos ésta por el paso
subterráneo y seguimos por el lado derecho, por la pista asfaltada.
Dejamos la
citada vía y tomamos la pista hasta la subida del calaberón, aquí es donde
quería llegar para probar la 27’5 de mi amiguete Isaac, ya que está por tierras
peruanas y tiene la bici “muerta de risa”. Llegados arriba reagrupamiento y
bajada hacia Campomanes y aquí un veloz felino sale a “corrernos” como los san
fermines y es Noca el que pone a prueba la velocidad del gato siguiéndole hasta
que se desvió. Llegados al cortijo de Campomanes reagrupamiento, hidratación y
salimos zumbando pista hacia arriba dirección cornalvo, llegamos a la
intersección hacia la presa, continuamos por la pista de la izquierda que sigue
hasta cornalvo, y a unos kilómetros nos desviamos a la izquierda, por el camino
recién obrado, de la finca “el huevo”. Hacemos un sube y baja, cruzamos unas
puertas canadienses y paramos debajo de una encina a esperar a los más
rezagados. Aquí es donde se abre un debate sobre si vamos bien o no, en esto
que David saca su “smartpfone” para ver el gps y resolver dudas. Solventado la
pequeña disputa, hay que retroceder 300 metros para continuar por un camino
anterior, que es el que desemboca al camino, donde se fijo la culminación a
nuestra ruta de hoy. Transitando por la pista hacemos una pequeña subida, y
llegada a nuestro itinerario, Cuatro Caños.
En el mencionado lugar, hay un
grupo de ciclistas de Mérida esperando a sus “cabras cojas”, paramos a comer y
a hacernos la foto de rigor con los compañeros de Mérida. Nos llama la atención
los carteles del parque que están arrancados y el metálico está cortado
literalmente, acto de rebeldía o travesura, no sabemos. El regreso esta fijado
por la presa de “la muela”, así que iniciamos la vuelta por la pista dando caza
a los compañeros de Mérida, que iniciaron la marcha unos instantes antes que
nosotros. Aquí es donde para mí, más disfruto de la ruta de hoy, por que el
camino hace pequeñas subidas y bajadas largas de poca pendiente, pero que
pedaleando te permite alcanzar altas velocidades. Entre subida y bajada nos
espetamos en la presa de “la muela”, aquí divisamos un conjunto de vacas de
distintos colores en la orilla, que hace un paisaje muy llamativo y hermoso.
Cruzamos
la presa para dirigirnos al cortijo de los lomos, e iniciamos una bajada por
una trialera con el pasto muy alto, que dificulta la visión sobre el terreno, y
aquí es donde pincha el compañero Noca, que no es un pinchazo cualquiera, era
un clavo como un dedo de largo, así que un descanso buscando la sombra, como
no.
Resuelto el inconveniente iniciamos la marcha, y desembocamos en el camino
obrado que nos conduce hasta el entalle, de aquí transcurrimos hacia el
cuadraillo y… mariquita el último, iniciamos la bajada para llegar al canal,
cada uno a su paso.
Reagrupamiento de personal y nos apresuramos hacia el
Sajonia, que el calor a estas horas va haciendo estrías. En la carretera del
Sajonia al pueblo, el grupo se corta como todos sabemos, a “soltar lastres”,
para rodar como unos condenados hasta
llegar al pueblo. Hacemos otro reagrupamiento y zumbando a ver a Alejandro y la
madrina, que las cervezas, coca colas y alitas de pollo esperan. Dar la
enhorabuena a los niños que han aguantado toda la ruta como unos campeones y a
Manolo que se ha desvirgado como perrigalgo. Apuntado para el bautizo en
Guadalupe
Crónica Pedro Collado "Rony" |
Enhorabuena Pedro, una crónica muy completa y muy bien redactada.
ResponderEliminarEnhorabuena Pedro, una crónica muy completa y muy bien redactada. La pena es que el monte se está agostando y vais a tener que tirar a la carretera.
ResponderEliminarFelicidades a los competidores y a los de Guadalupe.
Manolo bienvenido al club perrigalguero. Paco.
Así se hace una crónica socio!!! Recorrido tranquilito, de los que me gustan a mi... Enhorabuena a todos los perris que realizaron la "rutita" a Guadalupe y las competiciones por toda Extremadura.
ResponderEliminarMuy buena crónica, Rony, si señor. Y eso que por un instante me temí que pasaras al selecto club de "los breves", cuando saltaste de Torrefresneda a Cuatro Caños, sin miramientos, pero no, te has esmerado de lo lindo.
ResponderEliminarMe repito, reiterando mi enhorabuena a todos los valientes que cumplieron con sus objetivos. Como no, también a Manolito, que ha se ha iniciado como Perrigalgo en una ruta oficial. Lo siguiente...la crónica.
En cuanto a lo de Cornalvo, me inclino, sin duda alguna, por vandalismo, puro y duro, de un/unos descerebrados. Si no apreciamos y conservamos lo que merece la pena, a qué podemos aspirar. Una verdadera lástima.
ResponderEliminarPedazo crónica besalmohadas!!! Eres puro arte!!! A ver si el domingo hay menos grupos y nos juntamos todos....
ResponderEliminarPerico, por mi parte entras directamente a formar parte de los privilegiados que juegan la "champions league" de las crónicas.
ResponderEliminarMe alegro de que los jóvenes vayan aguantando bien, así como que se vayan uniendo nuevos candidatos a Perrigalgos.
Enhorabuena a los de Guadalupe que han puesto una "pica en Flandes" en un tiempo récord.
Yo, por mi parte, me separé de los "guadalupanos" y me aventuré por la Sierra de Pela, a ver qué descubría. La ruta no fue todo lo satisfactoria que cabría desear, pero mereció la pena en algunos tramos. Al final me salieron 130 kilómetros del ala, que tampoco es moco de pavo.