Fotos:
Javi
Yeyo
Oso
Pancho
Juan
Capi
Joaquín
Julio
Después de varios meses de ausencia, hoy me decido a salir,
sin tener clara la hora, voy preparando el desayuno, sacando las botellas ,
cuando siento la llamada de la madre naturaleza, tranquilo pensando que iba
sobrado de tiempo, me acoplo en el trono leyendo un poco las noticias del día,
cuando de repente se me enciende la
bombilla y claro , decido mandar un mensaje a los colegas para que me
confirmaran el horario, Yeyo es el primero en contestar y zasca, que salimos a
las 08.30, mama, se acabó la tranquilidad, a correr que no llegamos.
Ya en la plaza se encuentra la cuadrilla esperándome para
arrancar la ruta de hoy, nada un paseíto a Entrerios, pregunto los
kilómetros, 70 de na, más el IVA que
lleva de serie, pues apechugamos y para delante, Yeyo y yo comentamos que va a
ser mucha tela, después de varias semanas sin subirnos en la mtb, así que
comenzamos a llorar y a encomendarnos, sobre todo yo a San Rebufo, patrón de
los ciclistas gorrones que esperan una ruta jodida.
Decidimos que mejor camino al principio y posteriormente la
vuelta sea por carretera, así que arrancamos buscando Medellín para pasar el
puente romano y adentrarnos ya en los caminos polvorientos, el ritmo es bueno,
el personal esta fuerte, Capilla, Javi el Pistones, Oso , Pancho, hoy sin su
socio, van tirando del personal, nos
equivocamos un par de veces de camino, son tantos los que hay, deshacemos y
continuamos, el ritmo en el camino sigue siendo alto, demasiado alto, pero
bueno hay vamos agazapados y tragando polvo.
Pasamos la iglesia que se encuentra en medio del camino, que
no sé si es la iglesia de Don Llorente, ya me corregirán si no es así, y sin
decir ni mu, coño, que ya estamos en consiver, atravesamos la antigua carretera
que va de Don Benito a Miajadas, y continuamos fuertes con la marcha, seguimos
una ruta marcada con estacas con una plaquita en rojo, la mañana esta fresquita
el aire va de nuestro lado, seguimos por
caminos que ya os digo yo, que el lunes no daba con ellos, más que nada porque
si levanto la cabeza me pierdo.
Yeyo va el bicho pendiente de su flamante Polar, alto de
pulsaciones, con alguna lagrimilla en la mejilla pero va el bicho de cojones,
Encallaman ya te tenemos colocado, sigue la táctica de su compadre, pero ambos
tienen una reputación más que de sobra conocida en la peña, de frescos
llorones, jajajaja.
El Zújar va bien de agua, y ya nos estamos aproximando a
nuestra meta, pero antes hay que pasar el badén, la corriente es fuerte, tenemos ciertas dudas
de cruzar, el primer atrevido es Juan Luis montado en la bicicleta, avanza
fuerte pero una vez sale de la vegetación tiene que poner pie en suelo porque
la corriente lo desplaza, Javi sale en su ayuda, y ya el resto decidimos cruzar,
pero ya con la bicicleta al hombro, que fresquita y que bien sienta el agua.
La zona esta de lujo un césped bien cuidado, bastante sombra
, merenderos, nunca había estado allí, y esta súper bien, dos valientes, Yeyo Y
Capi después de tomar el aperitivo deciden darse el chapuzón de la mañana,
antes de iniciar de nuevo el camino de vuelta,
foto de rigor y camino de Entrerios.
Volvemos arrancar fuertes, ya el viento viene de cara pero
no es inconveniente para seguir a un
buen ritmo, parece que en vez de acercarnos al pueblo nos alejamos más, pero que pasa, nos
encomendamos a San Rebufo, y a dar pedales, no queda otra.
Paisaje lleno de
frutales, por todos lados, y ya empieza a notarse la pretemporada realizada por
Yeyo y Alfonso en Punta Cana, los dos se arriman a Capi Y Pistones, y empiezan
a tirar duro, que máquina, atravesamos la 430 a la altura del castillo de la
encomienda y vamos buscando, ahora parece que si Santa Amalia.
Dejamos Villar de Rena, y vamos dirección Hernán Cortes, estos cabrones cada vez tiran
más, Javi solo ante el peligro tirando
de nosotros la mayor parte de la ruta, aprovechándonos de su físico, no se
cansa nunca este tío.
Capi , Pancho, y los compadre pasan a dar relevos y esto no
provoca nada más que un aumento de la velocidad, Juan y Joaquín pasan también,
pero yo sigo fiel a mi Santo, claro ya la cosa se va de las manos, se ponen a
38 39 km, se produce un corte, porque claro ya está bien ir a 34 35 km, pero
estos bichos no tienen suficiente, menos mal que dura poco, ya vemos Hernán
Cortes al fondo.
Ya vamos bien de kilometro hoy, y decidimos con toda la
prudencia del mundo, continuar por la 430 hasta el pueblo, dado la velocidad
del grupo y los pocos kilómetros que nos quedan
estamos en un tris en la entrada
de Santa Amalia, ya relajando piernas vamos buscando la cervecita bien merecida
de hoy, y los chascarrillos de la ruta.
Buena y dura Ruta como siempre, los compadres sobraos, ah y
por cierto no seáis perracos y escribir las crónicas hombre, que es un ratito y
a todos nos gusta echarle un ojo, adiós.
Crónica Julio Jiménez |
Buenisima cronica don julius muy bien redactada y bien desarrollada toda la ruta. Pero fuimos mas despacio de lo q se cuenta y tiro solo pistones en toda la ruta,por cierto el compadre como va el unico q pudo hacerle un poco de sombra al susodicho
ResponderEliminarDon Julius, que decir que no sepas, me divierto con tus crónicas. Dices que el ritmo fue fuerte y ese le marca el último o sea que la gente en general esta fuerte, y los llorones ya sabemos como son mucho llorar pero desde que se fueron hacer la pretemporada a la Republica Dominicana estan que se salen. Por cierto gracias por hacer la crónica ya que el personal no pone nada más que excusa para no hacerlas pero luego preguntan por algunas de ellas después de pasar el tiempo.
ResponderEliminarQue grande eres, Julio!. La crónica no tiene desperdicio, fiel a tu estilo. Además es de agradecer tu predisposicióno a hacer crónicas. Creo que cada vez que te incorporas, te toca.
ResponderEliminarRutita típica de verano, con remojón incluido. A promocionar la costa dulce extremeña.
Es increíble como os meteis con los compadres, que manera de exagerar....que yo sepa al de la crónica no se le tuvo que esperar en ningún momento lo que quiere decir el nivel que se gasta el gachón. Buena crónica bicho, como acostumbras y encantado de incorporarme a mis perris.
ResponderEliminarPor cierto, que buena estaba el agua....