miércoles, 8 de junio de 2016

CADA PEDALADA UN RECUERDO



      
                      


Fotos:


 Faltan fotos hechas por la organización

Como ya sabéis este 5 de junio, para algunos, viene como especial en el calendario por tratarse del memorial de nuestro José Miguel. Desde hace unos meses se esta organizando su segundo memorial, con muchas cosas aprendidas y con ideas nuevas, pero sobre todo, con la misma ilusión, o incluso más que el pasado año. Solo decir que estoy muy orgulloso de aportar mi granito de arena, por ser el hecho que es, para ayudar a la organización. Llego el día marcado en rojo en el calendario, Memorial de José Miguel lozano, después de dar muchas vueltas en la cama esa madrugada y dormir poco, a las 7 de la mañana, preparo mis atuendos, y, como no!!con el maillot conmemorativo del segundo memorial, y mi reciente adquisición, mi bici de carretera. Me dirijo hacia el pabellón,  para ayudar todo lo posible a los participantes, al aproximarme al pabellón, observo como hay abundante gente montando las bicis, esto despierta en mí un sentimiento que hace ponérseme el vello de punta. Entro en él, y allí están las chicas encargadas de entregar los dorsales, esperando a los participantes, para darles el número y bolsa conmemorativa del memorial; con curiosidad observo que hay gente de Esparragosa de Lares y Valverde de Leganes, poblaciones muy retiradas, incluso una parejita de Bélgica, que han querido sumarse al memorial, impresionante, mención especial al Vasco, que vino desde allí en bicicleta haciendo 3 etapas antes de llegar a Don Benito.


 No faltaba ningún detalle, hasta el furgón para cargar bicicletas de posibles abandonos, lleva colocadas las escobas. Casi todo listo y a falta de 20 minutos para empezar, me voy a la plaza acompañando a participantes que no sabían llegar al itinerario de salida. Al llegar a la salida el ambiente era espectacular, casi nadie estaba sin el maillot conmemorativo, era precioso, no faltaba nadie, amigos, compañeros del equipo ciclista de la infancia, familiares, por supuesto José y Ana los padres, y como no, María José, su esposa, con la Pinarello recién reparada, negra y azul, con su frase serigrafiada: “cuando el recorrido se vuelve duro, solo los duros siguen empujando”, estaba flamante. La de pedaladas que habrá dado en ella, la de cumbres que habrá subido, como las de la quebrantahuesos entre otras. Cada vez que la veo, una sensación recorre en mí, un escalofrío desde la nunca, hasta donde acaba la espalda. Todas eran bonitas pero la Pinarello es especial, esa bicicleta que montaba ese maldito día, día en el que nos acordaremos hasta el fin de nuestra existencia.


 Poco a poco va llegando la hora de salida, Javi Bravo el presidente del club al que J. Miguel pertenecía, comenzó a decir unas palabras de agradecimiento a todos los participantes y reglas de la marcha, pasadas las 8:30 María José, esposa, Ana y José padres, cortan la cinta de comienzo de carrera.


 Mientras vamos avanzando poco a poco, los familiares y gente allí presente nos despiden entre aplausos, uno de los momentos emotivos de la marcha, se me vuelve a poner el vello de punta. La policía local nos acompaña hasta el final del pueblo, detrás el coche de apertura de carrera y posteriormente José, su padre,  va con el Golf  blanco que pertenecía a él, que de anécdotas tengo del Golf... Bajamos la plaza, hasta la carretera que cruza el pueblo, continuamos por ésta, hasta la rotonda de la entrada, al pasar los diversos bares por los que transcurre dicha calzada, la gente queda perpleja al ver el paso del pelotón, en la rotonda, continuamos por la carretera de Valdehornillos.


 Nos alejamos del pueblo a un ritmo pausado, hasta llegar a la localidad de Valdehornillos, el ritmo comienza a subir un poquito, y algunos participantes se apartan a los lados para mear, que misterio!!, decían algunos. Llegamos a Vivares, y giramos hacia Miajadas, en este trayecto descubro a la pareja que nos acompañan de Bélgica, evidentemente por su idioma. Entre charlas, encuentros y demás, llegamos a Miajadas, torcemos por el ferial, y seguimos hacia el polígono, cogemos dirección al restaurante Triana, hacemos la rotonda y salimos del pueblo rumbo a Almoharín, retraso unas posiciones y observo que nadie a querido faltar a la cita, estaba, Willi, Amalio, Dani Carrasco, J. Antonio Carmona, Virginia Carrasco, Manu, Alex Parejo, Vicky… en fin, gente que no es habitual a la bicicleta y a querido participar en este homenaje.


Llegamos a Almoharín y aquí los que se decantan por la ruta corta, siguen las indicaciones de Teresa, que los guía hacia la nave multiusos del pueblo, donde está confeccionado el avituallamiento, y deberán esperarnos que volvamos de Montánchez. Nosotros seguimos la carretera hacia Valdemorales, nada mas salir de Almoharin comienza la subida, con poca pendiente, y comienza a dividirse el pelotón, seguimos escalando, poco a poco van cayendo participantes del grupo de cabeza, llegamos al tramo mas exigente de esta subida, donde aparece el carril de vehículos lentos, la calzada cuenta con tres carriles, yo sigo pedaleando mirando hacia abajo, al levantar la cabeza miro las antenas que se alzan en la sierra de Montanchez, pienso: ya queda menos amigo!!! Miro a mi lado y observo que el único que conozco es Ismael que viene con la de montaña, solo estábamos dos perrigalgos. Al llegar a Valdemorales le comento a Ismael que nadie habla, lo que me hace meditar en esperar al grupo perrigalgo y subir charlando. Nada más abandonar el pueblo, la guardia civil de tráfico nos reagrupa en un apartadero a la derecha de la carretera, lógico había unos 5 kilómetros de ciclistas, cada uno a su marcha. La expectativa de participantes que subirían se han superado con creces.



 Resuelto el entuerto, continuamos dirección Cáceres, pasamos el cruce de La Zarza, subimos un pequeño repecho y a la bajada giramos a la izquierda para comenzar a subir, subimos un poquito, bajamos y aquí es “donde se empiezan a cocer las habas”, comenzamos la subida, el año pasado la realicé a mi ritmo, pero este año me hace gran ilusión subir con  María José, igual que algunos perrigalgos, como Javi Parejo, Pablo Carrascosa, y el lado oscuro… Chino, Caldera, Tomás David. También nos acompaña algunos componentes del club ciclista don benito, como Raúl Celdrán y alguno más que no sé los nombres. Bueno pues la subida, empezamos muy bien cogiendo a participantes,  otros rebasándonos, subiendo a un buen ritmo, María José  fenomenal, subiendo como una campeona, el año que viene quizás no podremos subir con ella, seguramente nos barreará. La Pinarello me tiene embelesado, mi cabeza es un hervidero de  sensaciones contrastadas, emoción, emotividad entusiasmo y orgullo por un lado, y tristeza por el otro. 




Cuadrilla de los 10 euros

 Llegamos a la rampa de “los mesones” unas de las más duras, la solventamos bien, el único problema, Pablo parece que habla poco, raro en él, señal que va dándolo todo. Llegamos a la fuente, y me hace especial gracia el comentario de un hombre mayor, “venga, que ya no hay más cuestas”, menos mal que conocemos el terreno. A falta de dos repechos, Tomas David se distancia de nosotros, para subir con Ismael, yo con mi compañera de subida y acompañantes, nos queda una subida, en la que observo que en la cima hay algunos familiares, que, entre aplausos y jaleos, parece que nos dan cuerda y subimos con más alegría. Bueno pues la ascensión había terminado, ahora tocaba bajar, como a mi me gusta bajar rápido no tardo en poner el plato grande y aprovechar para dar unas pedaladas y coger velocidad antes de llegar a la curva, a mi espalda escucho como Javi llama a Caldera a gritos, pero no le doy mucha importancia. Justamente antes de entrar en el pueblo espero a María José que se a quedado rezagada, y al aproximarse me cuentan que Caldera a tenido una caída sin consecuencias graves, raspones y alguna zona dolorida. Hacemos una pequeña subida y llegamos a Montanchez,  el avituallamiento estaba justo en una zona lateral de la rotonda, hay estaban nuestras amigas, Almudena, Sandra, Diana, Violeta, Pili… todas multiplicándose para que nadie quedara sin agua, plátanos o barritas. 


Tampoco se lo han querido perder la peña motera de santa Amalia que han hecho su ruta y han calculado más o menos la hora que estaríamos arriba, como no, tampoco falta Villarino y Miguelito, aunque se a quedado en Almoharín a querido sumarse a esta subida de forma diferente. Todo iba a pedir de boca, mañana fresca, poco aire, salvo el incidente de Caldera ningún contratiempo. La gente se fotografía, descansa y repone fuerzas.




 Después de haber recobrado energía toca proseguir la marcha, continuamos hacia abajo hasta llegar a la rotonda de la carretera de Alcuéscar, tomamos dirección a dicho pueblo y en el cruce de Arroyomolinos torcemos para seguir hacia la mencionada localidad. Pasamos el pueblo y en un santiamén nos plantamos en Almoharin, este tramo de Montánchez  a Almoharín, se hace muy rápido con el aire a favor. Al llegar a la rotonda de Almoharín, nos adentramos en el pueblo, callejeamos un poquito y llegamos a la nave multiusos de dicho pueblo. Ahí nos esperan los de la ruta corta y un gran número de personas, casi toda la familia, y amigos que vuelven a ovacionar entre aplausos nuestra llegada. Aquí está el avituallamiento sólido y líquido. Había bocatas, refrescos, frutos secos, barritas, fruta, agua, hasta música con saxofonista y todo!!!! amenizado por Pepe Burgos. Charlamos sobre la ruta, hacemos nuestras necesidades, nos hacemos la foto familiar y salimos escopeteados hacia Santa Amalia para no recolgar mucho el memorial.





 Cogemos dirección Miajadas, llegados a esta localidad, vamos dirección al Triana, torcemos a la derecha para el poligono y cogemos dirección el ferial. El memorial iba consumándose poco a poco, sin ningún percance excepto el de Caldera, todo iba sobre ruedas, nunca mejor dicho. Llegamos a la carretera de Don Benito, cogemos dirección Vivares, cada pedalada era una menos, el calor iba haciéndose notar, al pasar por la rotonda que cruza la autovía por encima, la culebrilla que dibujaba la refilera de ciclistas por la carretera era impresionante, otra vez recorre mi cuerpo la piel de gallina. En Vivares torcemos hacia Santa Amalia, carretera estrecha, había que ir con cuidado con los coches que cruzábamos y las motos de carrera al adelantar, me sitúo casi en las primeras posiciones con algún compañero perrigalgo,  llegamos a Valdehornillos, el calor estaba haciendo mella, justo delante de mí aparece una chica con una bici de montaña, casi sin fuerzas y sin responderle las piernas me tocó empujarla hasta Santa Amalia, la chica nunca había salido en bici, pero hoy era una ocasión especial, me contaba.




 Todo ese esfuerzo que había hecho ella, todos los participantes, los motoristas, organización, todo es por él, por homenajearle. Aunque él era tan grande, que todo esto se queda pequeño por condecorarle. Justo antes de entrar en Santa Amalia, hacemos un reagrupamiento, para que no pase lo del año pasado, que no se rompiera el pelotón. Reanudamos la marcha y llegamos a la rotonda, seguimos hacia dentro del pueblo, toda la gente que nos encontrábamos, saludaba el paso del pelotón, esto es un hecho insólito en el pueblo, exceptuando el memorial del pasado año. Cruzamos todo el pueblo para acabar la ruta en el cementerio, vamos pasando por el pasillo entes de entrar en el cementerio y a los lados los familiares, amigos, y demás nos aplauden, veo muchas caras emocionadas, que me hace sentir acongojo, este es el momento más emotivo y especial de toda la marcha, en el final del pasillo me encuentro con José, su padre, un gran persona, sufriendo una vida injusta.


 Esperamos un poquito a todos los participantes, María José, José, y Ana, portan las flores que se ofrecerán en la lápida de José Miguel. Solo hay que entrar un poquito para encontradnos con su lápida, donde se hace la ofrenda, colocan las flores, donde imperia el silencio, silencio que es roto por un gran aplauso, un aplauso conmovedor. Todo salió a pedir de boca, el esfuerzo a valido la pena. Después de esto y vestirnos para asistir a la comida poco más que contar, solo que  en la comida hubo sorteo de regalos para los participantes a la marcha, y sobre todo destacar un video donde proyectaron fotos de Jose Miguel.


Como siempre dar las gracias a todos los participantes, motoristas, cruz roja, casas colaboradoras, médico, amigos, familiares, Ayuntamiento de Almoharín y Santa Amalia y sobre todo organizadores.

Sé que allá donde estés estarás muy orgulloso de todo esto, aunque todo esto es corto para homenajearte
 
Crónica Pedro Collado "Rony"

6 comentarios:

  1. Enhorabuena Perico por el peazo de crónica que te has marcado. La verdad es que la ocasión lo merecía y has echado todo tu saber en relatar una jornada llena de recuerdos y emotividad. Por supuesto que la familia Perrigalguera estuvo bien representada con una nutrida presencia.Fenomenal la organización y el trabajo que habéis realizado, pero la ocasión merecía la pena. Un saludo a todos.

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  2. Gracias por la genial crónica Pedro.

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  3. Gracias por la genial crónica Pedro.

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  4. Fenomenal y emotiva crónica, Pedro. Me alegro que todo saliera perfecto. Enhorabuena.

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  5. Rony no hay nadie mejor para narrar esta ruta que no seáis vosotros, desee aquí agradexer a todos los organizadores el esfuerzo y ganas que han puesto para que todo saliera bien, y así fue. El año que viene estaremos de nuevo, y Domingo te toca a tí.

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  6. Sabía que te ibas a marcar una crónica a la altura del memorial, enhorabuena crack por escribir lo acontecido en el día poniendo tanto sentimiento, está claro que con días como este Jose Miguel estará siempre presente en nuestras cabezas y en nuestros corazones, hasta el año que viene....

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