La Ruta de las Romerias

( domingo, 4 de abril de 2010 )

Asistentes a la ruta:

José María Almaraz Luna
Emiliano Andrade Rodríguez
Juan Manuel Barroso Morcillo
Jesús Beltrán Simón
Florencio Benítez-Cano
José Manuel Benítez-Cano
Juan Luis Capilla Camacho
Pablo Carrascosa Sánchez
Paco Cidoncha Carrascosa
Pedro Carrasco Cuesta
Pedro Cuesta Flores
José Luis Jiménez Dorado
Antonio Indias Fernández
Gerardo Muñoz Lozano
Andrés Nieto Cortés
Domingo Pablos Bautista
Javi Parejo Jiménez
Santiago Sánchez Díaz
Francisco Velarde Dorado

Tiempo empleado: 3 h. 33 m. 39 sg.
Velocidad Máxima: 52,2 Km/h.
Velocidad Media: 17,9 Km/h.
Parciales: 63,79 Kms
Odómetro: 10.504 Kms.
Totales: 10.504 Kms.

Recorrido: Plaza de España, Carretera de Cáceres, Cruce del Sajonia, Canal Principal de Orellana, Camino de Cuadradillo, Camino del Castillejo de Abajo, Castillejos Reunidos, Cordel de Guareña, Ermita de Arromolinos, Carretera de Arroyomolinos a Almoharín, Ermita de Nuestra Señora de Sopetrán, Vía de servicio de la autovía, Pista de acequia, Malmedra, Huerto Juárez, Carretera de Cáceres, Plaza de España.

Comentario:

Como se puede observar, he tenido que cambiar el recorrido respecto al que propuse en el día de ayer, que por cierto como ya había poco tiempo, la mayoría de la gente ni siquiera lo había visto. De todas maneras ha sido muy parecido, incluso ha habido rectificación sobre la marcha al recorrido establecido para el día de hoy.




Un nutrido grupo de perrigalgos nos hemos juntado en el día de hoy, rozando la veintena.
A pesar de que a primeras horas de la mañana hacía un poquito de fresco, varios componentes del grupo se han atrevido ya con el traje corto de verano, con el oficial de la Peña. Pero la mayoría hemos optado por una indumentaria algo más apropiada para estas fechas en la que todavía refresca.

Pasados los primeros momentos este fresquillo matutino desapareció y el día ha estado verdaderamente estupendo. Aún quedan algunos charcos y algo de barro en los lugares más sombríos, pero en cambio en los sitios más soleados ya comienza a levantarse algo de polvo al paso de las bicicletas. La arena también se está secando y pone más fluida, así que al pasar las bicicletas las ruedas hacen quiebros y algunas personas van al suelo, como ha sido el caso de Antonio Indias, siendo arrollado materialmente por Paquito Cidoncha, que iba muy pegadito a él, y a pesar de sus frenos de discos no pudo frenar a tiempo. Por lo demás no ha habido ningún incidente que lamentar y el día de pedaleo ha transcurrido pacífico y sereno.

Juan Manuel Barroso me indicó que tenía localizada una matrícula en la pista del río, así que nos adelantamos un poco y fuimos a por ella, escondiéndola detrás de una señal para recogerla al regreso: E BA 5207 X.

Agrupado el pelotón hasta la subida de la cuesta del Cuadradillo, donde comienzan los primeros tirones de los más fuertes, y reagrupados de nuevo, pedaleamos todos juntos hasta la próxima subidita que hay antes de llegar a los Castillejos Reunidos, y en adelante llegamos prácticamente todos juntos a la Ermita de Arroyomolinos de Montánchez, donde todavía no habían traído al Santo y casi no había gente, aparte de “los feriantes”. Allí paramos a reponer las fuerzas con el tentempié y hacernos la foto de rigor en la portada de la ermita, concretamente en sus “enormes” escalinatas.

Domingo estuvo preguntando a un señor del lugar el lugar a donde conducía el cordel que habíamos traído hasta llegar a la carretera y que cruza ésta, y como le indicara que iba a salir a la carretera de Almoharín, hizo la propuesta de tirar por allí, que aunque no fue acogida por todos, habiendo división de pareceres al final se impuso dicha propuesta y por allí no fuimos, saliendo a la citada carretera.

En la bajada me encontré una nueva matrícula que paré a recoger para la colección: CC – 0776 – I.



Al llegar a Almoharín tomamos el atroche que hay para el Canal de Orellana y de allí la pista que nos llevaría a la Ermita de Nuestra Señora de Sopetrán, donde también paramos un momento, unos para ver la ermita por dentro, ya que estaba abierta y otros para tomarnos unos vinos de la bota de unos lugareños que pretendían alargar un poco la romería del Lunes de Pascua.
Los cuatro veteranos nos quedamos rezagados con los vinillos, ya que Domingo conocía a uno de ellos y se paró también, al igual que Andrés y Pedro Carrasco, así que cogimos un pedaleo alegre para dar caza al grupo. Sin más incidencias, conseguimos llegar a buena hora a la sede de la peña, donde nuestra madrina, Mari Carmen, nos tenía preparados en el día de hoy unos soberbios pinchos morunos que devoramos materialmente.

Hasta la próxima semana.