RUTA 07/02/2016
Javi Parejo
Jose Luis Jimenez
Juan Luis Capilla
Pablo Carrascosa
Diego Parejo
Paco Cidoncha
Santiago Sanchez
David Liviano
Juan Nieto
Diego Nieto
Jose Noca
Javi Camacho
Antonio Indias
Jose Luis Gomez
Alfonso Merino
David Fuentes
Jesús Cidoncha
Esther Díez
Ruta: Santa Amalia – Sajonia –
Canal de Orellana – Cuadradillo -
Entalle - Castillejos de Abajo-
Finca Hnos. Castello – Sierra la Atalaya – Fuente Collado – Venta la Guia – Cuadradillo
– Canal de Orellana – Sajonia – Santa Amalia.
Videos:
https://youtu.be/Wh3Y5FQkmLwhttps://youtu.be/FL1thwWxaKs
https://youtu.be/LtKJkDnp7dk
https://youtu.be/tyuuV_l4-oE
https://youtu.be/MXrWo2e2JRw
https://youtu.be/vdcLjpg23BE
https://youtu.be/fgq2KR7WKtY
Fotos:
Domingo 7 de
febrero de 2016. Domingo de carnaval, fiesta pagana por excelencia y muy
arraigada en nuestra localidad donde el día anterior pudimos disfrutar de un
divertido, colorido y coreografiado
desfile de comparsas que hacen del carnaval amaliense, un año mas, uno de los
mas importante de la comarca, sino el que más.
De camino a la
plaza voy sorteando pelucas, espadas, caretas y varios botellones esparcido por
el asfalto. Lo que la noche anterior era una autentico hervidero de gente
venidas de toda la comarca, hoy era un mar en calma si no fuera por la
presencia de los perrigalgos congregados y por los efectivos de limpieza
municipal que se afanaban para quedar nuestra plaza con decoro.
Diecisiete
individuos y una “individua” seremos los protagonistas de la ruta. La individua
es Esther, mujer de Diego Parejo, valiente fémina que a la postre comprobará
que no es tan fiero el león como le pintan.
No hay ruta
marcada y propongo ir a la “cuesta cochina” por las inmediaciones del río
Aljucén. Jose Luis declina esta oferta, que luego nos pesará, y se propone ir a
las charcas de los Castillejos. Salimos a las nueve y poco de la plaza
dirección al restaurante Sajonia en la N-V.
Pedaleamos de
forma distendida hasta llegar a dicho punto y tomamos la pista con destino al
Canal de Orellana. La mañana esta perfecta para la época en que nos
encontramos, cielo despejado, temperatura agradable y con una pequeña brisa
para que nos acordemos que todavía estamos en invierno. Al llegar al inicio del
camino del cuadradillo, observo numerosos
coches, incidencia que marcará el devenir de la ruta.
Atravesamos la
finca del “Cuadradillo” hasta que llegamos a su querida cuesta que cada uno
corona a su ritmo. En lo alto, una vez hecho el receso, Javi propone ir en
busca de la cueva del bandido Serna, objetivo que también se han propuesto los
senderistas amalienses, cuyos vehículos quedaron aparcados en la entrada del
camino del cuadradillo. Por supuesto todos dimos nuestra venia a la propuesta,
aunque algunos ya nos estábamos acordando de que la cuesta cochina era mejor
opción.
Cuenta la
leyenda que durante la primera mitad del siglo XIX, época contemporánea a la
fundación de nuestro pueblo Santa Amalia, merodeaban el Camino Real, que unía
Badajoz con Madrid, numerosos malhechores y bandidos escondidos en los Montes
Cuadrados que, aprovechando el transito de diligencias por esas zonas tan
despobladas, cometían sus fechorías a pocos kilómetros de la “Casa de Postas” o
“Venta la Guía”, en la zona del Confesionario. El mas famosos de estos bandidos
se llamaba Serna, cuya guarida todavía es un misterio, el cual traía de cabeza
al recién creado cuerpo de la Guardia Civil por sus continuos ataques en las
inmediaciones del único lugar de descanso y aposento para las caballerías y
viajeros entre Mérida y Trujillo.
Hoy nos hemos
aventurado a descubrirla y parece ser que se encuentra en la sierra de la
Atalaya, en el valle del Pompa, pegadita a Valdecabreros. Para allá que vamos…
Descendemos la
cuesta del Cuadradillo, llegamos al Entalle y giramos a la derecha para
acometer la cuesta de los Castillejos de Abajo. Ya calentitos, nos reagrupamos
justo en la entrada de la finca Castillejos de Arriba. Gateamos por una valla
situada a la derecha de la citada puerta hacia el interior de la finca y
hacemos el recorrido pendiente arriba, el mismo que hace tres semanas atrás.
Vamos subiendo metro a metro por una pendiente que por lo menos se torna al 17%
en algún tramo, para después disfrutar de una bonita bajada que nos pone en
fila de a uno. Sin dejar el camino, giramos 90 º a la derecha y recorremos unos
1000 metros hasta estar paralelos a otro camino que transcurre por la finca de
los Hnos. Castello, con lo que nos toca saltar otra valla.
Hasta ahora
vamos siguiendo el mismo itinerario que hace varias rutas, cuando hollamos el vértice
geodésico de la Parrilla, deambulando por estas cercanas e inexploradas fincas
que presentan un verde y una humedad ideales para el pedaleo. Antes de la
enésima subidita que nos lleva a una puerta, vemos a los hermanos Teniente
haciendo carbón a la vera del camino.
Una vez
colados por la puerta, en lugar de bajar el camino, como hace varias semanas,
decidimos explorar el camino que sale a la derecha. Este tramo, que transcurre
por una de las faldas del valle Terrero va picando hacia arriba y merece la
pena visitarle otro día.
Después de dos kilómetros aproximadamente, llegamos a
un cruce donde a la derecha está el cortijo de los Hnos. Castello y a la
izquierda una corta pero exigente cuesta. Evidentemente optamos por la cuesta,
y, tras culminarla, enlazamos con un camino a derechas con suave pendiente
ascendente hasta que, de bruces, nos topamos con una empinada bajada del 25% de
pendiente que impone respeto.
Ya agrupados,
seguimos el camino hacia la derecha y por un continuo sube y baja llegamos a
las estribaciones de la sierra de la Atalaya. Tomamos un camino que va rodeando
el pequeño macizo rocoso hasta que llegamos a una valla que nos obliga a girar
a la derecha y escalar unos 500 m al 8% por un cortafuego que, curiosamente,
delimita la provincia de Cáceres y Badajoz. Al finalizar la pendiente, con la
vegetación ya muy alta, se decide parar. Además, Javi Camacho va pinchado y se
pone manos a la obra para poner su bici en condiciones, momento que aprovechan
algunos para ir a buscar la cueva del Bandido Serna o para comer.
Después de 10
minutos parados aparecen los senderistas que suben por la misma cuesta que
nosotros, guiados por Lalo. Después de varios minutos de charla, ellos se apean
para comer y nosotros hacemos lo propia algunos metros mas abajo esperando a
los exploradores de la cueva.
Lo más parecido a una cueva que vimos |
Después de
varios minutos debatiendo si se ha descubierto la cueva o no, emprendemos el
regreso por el mismo camino hasta llegar al principal, girando esta vez a
derechas y seguir explorando. A pocos metros llegamos a un punto muerto, un
nudo de fincas, que nos obligan a saltar dos vallas en tan solo 10 metros.
Desembocamos en una finca recién repoblada y andamos como 300 metros sobre barbecho
hasta llegar a un camino que nos conduce a una verja. Estamos en la Parrilla y
el lugar ya es familiar. Seguimos explorando, y, en lugar de seguir el camino
ya conocido, se decide buscar Fuente Collado por el camino alternativo de la
izquierda. El lugar en cuestión estaba a pocos metros, aunque nos obligó a
cruzar un trigal por las rodadas del tractor.
Nos recreamos
un rato en el paraje de Fuente Collado y cogemos el archiconocido camino que
llega a las ruinas de la Venta de la Guia, anteriormente comentada. Antes de
llegar al antiguo Camino Real, giramos a la derecha y nos adentramos en la
finca de Valdecabreros, desde donde se divisa perfectamente la cara oeste de la
sierra de la Atalaya y el lugar donde hemos realizado el avituallamiento minutos
atrás. Abandonamos Valdecabreros y ahora sí,
transitamos por el Camino Real hasta que se topa con el camino de
cuadradillo. Seguramente este tramo fue uno de los que más rondó el bandido
Serna.
Al llegar al
camino del Cuadradillo, no volvemos a encontrar con los senderistas en su
regreso, aunque esta vez no pudimos nada mas que saludar dado el ritmo que se cogió
hasta llegar al Canal de Orellana. Del canal bajamos hasta el Sajonia y desde
ahí hasta Santa Amalia a un ritmo de 40 km/h, que provocó algún descolgamiento.
Reagrupación en la piscina y llegada a la sede sobre las 13 horas.
La ruta no fue
mucho mas de 40 kilómetros pero es de las que crean afición, siempre
transitando por caminos llenos de vegetación, encinas y charcos, con continuos
sube y baja, alternándose cuestas exigentes con bajadas cargadas de adrenalina.
Además, descubrir nuevas rutas y parajes tiene su merito, sobre todo si se
encuentran a 20 km de casa.
Enhorabuena
Esther porque ni se ha notado que venías con nosotros. Ruta exigente que has
completado como indica tu apellido, de diez.
En fin,
después de justamente un año, ya era hora de que me tocara escribir. Hasta la próxima…
Crónica David Liviano. |
David da gusto leer tus crónicas, pues aprovechas para contarnos una parte de historia y además nos cartografías el terreno de maravilla, en cuanto la ruta estuvo muy entretenida pero la cueva si es esa este hombre no llegaría a mayor. A seguir disfrutando del monte que aún nos quedan bastantes variantes que descubrir, no pienso esperar tanto para ver otro relato tuyo. Gracias.
ResponderEliminar¡Un año sin escribir una crónica! Ya te vale, tío. Al menos, el fenomenal relato de esta ruta “ciclohitórica”, te servirá para atenuar la sanción. Otra ruta con preciosos tramos inéditos y con tintes históricos de nuestro pueblo. Qué más se puede pedir. Qué no dimos con la cueva, pues normal. El tal Serna, como buen bandido que se precie, no iba a montarse la choza en Guantánamo.
ResponderEliminarEsther, y demás perrigalgas, tenéis que uniros al grupo y vamos a dejarnos de separatismos de género.
Os dejo un enlace de la colonización de nuestro pueblo, en el que podéis encontrar algunos pasajes sobre las peripecias del proscrito Serna.
http://www.amigosdesantaamalia.es/la_colonizacion_en_ex.html
Felicidades David por tu detallado y documentado relato. Para los que desconocemos la historia de la zona es un placer leerlo.
ResponderEliminarMuchas gracias por la parte que me toca. Como tu bien dices:"Creáis afición ".
Sois un grupo estupendo, nos acogéis y arropais sin distinción.
Espero repetir y disfrutar de estas vuestras locuras.
Que poca verguenza David, con lo bien que se te da la pluma y lo poco que te prodigas por estos lares....enhorabuena máquina porque mejor no se puede contar lo que pasó!!! y no tardes tanto la próxima vez,bueno espera, si tú también vienes a la covatilla.....
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