miércoles, 29 de mayo de 2013

SIN RUMBO SALIMOS Y DE LAS VACAS HUÍMOS





Domingo 8:15 de la mañana, después de un tiempo de ausencia por las labores del campo, me dispongo a salir con la bici con mucha alegría y con ganas de ver a la familia perrigalguera. Me pongo el traje corto, lleno de agua la mochila y echo unas barritas en ella, me dispongo a coger mi “burra” que estaba llena de telarañas y salgo zumbando al punto de encuentro perrigalguero, que al llegar a dicho punto me asombra las ausencias como don Pedro Carrasco, Antonio Indias, Rotri o algún amiguete mío bobillo, las comuniones, cumpleaños o las lesiones han hecho mella.

Hoy nos acompaña un compañero no habitual “Noca”. También me percato de algunas “burras” no conocidas por mí, como la “doble” de Capi o la “tuneada” de Tomas David. 16 perrigalgos nos espetamos en la plaza para salir sin un itinerario concreto, aunque, lo que si iremos a ver es el camino nuevo que están haciendo desde un poquito más adelante del entalle hasta el Rugidero.


Una vez todos puestos en la “línea de salida” damos la habitual vuelta a la plaza, cogemos la calle de los muertos, ponemos rumbo hacia el Sajonia charlando distendidamente, una vez allí torcemos a la izquierda y cogemos la pista hacia el canal de Orellana. Adentrados en la pista tomamos dirección hacia la pista de Alico que llegados al cruce, el amigo Tite nos abandona. 15 bicicleteros nos dirigimos pista para arriba hacia las casas y llegado a la verja de la pista que va por detrás de las casas nos adentramos hacia el citado camino, itinerario nuevo para mí… por que en vez de torcer a la a la izquierda y subir por detrás de las casas seguimos el camino recto, hacia una variante, que decía alguno saber, hasta el pino.

Adentrados por el camino se escucha de lejos 2 mastines ladrando que a los que nos da un poco de respeto los perros grandes hace que nos acojonemos un poquito, aunque como dice el refrán perro ladrador poco mordedor. Pasado el sustillo continuamos el camino que a pocos metros desaparece y nos obliga a subir campo através entre jaras, piedras y encinas que hacen un poco difícil la subida. Es en este punto donde un servidor se revuelca los tocinos en la empedregada subida.


Un poco más delante de mi caída del camino se hace intransitable y nos obliga a echarnos las bicis al lomo, que un poco mas adelante, para nuestra suerte y salud de nuestras espaldas, se ve el dichoso camino que nos conduce hasta el pino.

Continuamos a la izquierda para bajar hasta las mesas del capitán, torcemos a la izquierda y hacemos la bajada de las mezquitas a tumba abierta. Pablo se dispone a abrir la puerta llevándose por delante sin darse cuenta la bici de Lalo, hacemos la bajada cruzamos el arrollo y nos encontramos con la pista citada anteriormente en obras que la continuamos como si fuéramos dirección al entalle y es aquí donde tragamos un poquito de polvo y el compañero Noca hace la “vuelta del carnero” sin consecuencias.


 Continuamos la marcha hasta ver el cartel de “la atalaya” si no me equivoco, según dicho cartel el camino salía a la izquierda pero por mas que buscábamos no encontrábamos camino ninguno, hasta que Capi retrocedió un poco y apareció entre la maleza.


 Seguimos la marcha por dicho camino subiendo y al llegar arriba otra pequeña confusión hace que andemos otros 100 metros campo a través para enlazar con el camino que nos lleva hasta un cortijo de vacas que las acompañan 2 toros con una mirada desafiante, aquí es donde echo de menos la compañía de Paco el demontre que se lleva bien con este ganado, pasamos entre las naves del cortijo y saltar mas adelante la cerca de piedras y continuar por el camino de valdelaslleguas, si estoy confundido corregirme en los comentarios.



Seguimos el camino hasta llegar a un cruce, hacemos una parada de reagrupamiento, que al no llevar un itinerario fijo haya diversidad de opiniones sobre donde comernos la merendola. Giramos a la derecha hacemos una leve bajada que Javi nos advierte a los primeros de tomar el primer camino a la izquierda, y parece ser que entre bajadas y debates ya esta decidido donde vamos a para a comer. Hacemos una subida, llegamos arriba, paramos para reagruparnos y ya me voy notando la inactividad.


 Bordeamos una pequeña charca seguimos recto, continuamos por una trialera y llegamos a la orilla de una charca de los castillejos que es donde paramos para comernos las barritas, plátanos etc.




Foto para el recuerdo y zumbando para casa que Diegui parece ser que empieza a estornudar a causa de la alergia . Seguimos por la trialera hacemos una bajada, y ¿con qué nos topamos? Con bacas otra vez, en mitad del camino con sus crías, algunos decidimos bordearlas y otros más valientes tiran por el camino “ajuntando” a las vacas para que se espanten, que nos acompañan corriendo al lado durante unos metros. Seguimos por el camino hasta encontrar una subida a la izquierda, se abre un pequeño debate, si hacer la subida o seguir por el camino, pues queda aclarado por un perro que viene ladrando hacia nosotros y algunos subimos como una moto la subida empedregada .



Ésta obliga a algunos a echar pie a tierra y otros se quedan hablando con el guarda al que le acompañaba el perro. Hacemos otra parada para reagruparnos y emprendemos la marcha que a pocos metros y… pinchazo de Javi, Este hace que por casualidad nos demos cuenta de que no gozan de buena salud algunas bombas de inflado. Resuelto el entuerto continuamos para llegar al comienzo de la bajada hasta el entalle y es ahí donde el amigo Juanlu y yo nos intercambiamos las monturas para probar que tal va la doble suspensión, resaltar que es una maravilla. Al llegar abajo, al entalle, me dió pena que se acabara la cuesta, así que el próximo cambio una doble suspensión, a esperar a los reyes magos del año que viene.


Continuamos por el camino de cuadraillo, pasamos la cuesta de la novia, llegamos arriba de cuadraillo y mariquita el último algunos optan por seguir el camino que va por la casa de cuadraillo y otros optan por continuar por la variante a la casa. Al llegar abajo Juanlu que pincha, algunos aprovechamos para coger un poco de aire por que después de un tiempo en el dique seco se va haciendo la ruta un poco dura. Resuelto el incidente salimos pitando hacia la pista del canal y en un santiamén nos plantamos en el Sajonia, para comenzar a rodar hasta el pueblo y plantarnos anca Moniato a las 12.30 para recuperar fuerzas con las cervecitas y unas patatitas al alioli.

 No me quería despedir sin destacar que este sábado es el día de la convivencia perrigalguera, así que los más rezagados que confirmen su asistencia.

sábado, 25 de mayo de 2013

Día de Convivencia

Para poder hacer previsiones para este día nos gustaría saber con quienes vamos a contar, así que comuniquen la asistencia.

Pablo Carrascosa    2 - 2
Paco                        2 - 2
Tomás David          2
Juanito                     2
Juan Luis                 2 - 2
Andrés                     2 - 2
Domingo Pablos      2
Pedro Carrasco       2
Beltrán                    2
José Luis                 2 - 2
Diego Parejo           2 - 2
Javi Parejo              2 - 2
Diego Nieto             1
Pedro Rony              1
Mario Lozano          2
Pedro Antonio         2 - 1
Pedro Cuesta           2 - 1
David Liviano         2 - 1
Alberto Nailon        2 - 1

miércoles, 22 de mayo de 2013

En la Sierra el Saltillo hemos estado y con este cuento te lo he contado



Crónica Pedro Cuesta “Colores”

Había una vez diecisiete Perrigalgos que quedaron en juntarse en la Plaza de España de Santa Amalia. Una vez acordado el recorrido se pusieron e marcha, todos muy juntitos y agrupados, cogieron la carretera del Sajonia hasta llegar al río. Al pasar el río giraron a la derecha dirección Las Monjas, con ambiente distendido y charlatán cruzaron la autovía dirección las Minas de la Parrilla. Un alto en el camino, pues había que ver una máquina hundida hasta el pescuezo, no estaba sola, pues dos compañeras la estaban custodiando.



Una vez puesto en marcha un perrigalgo llamado José Luis desfallece, tiene problemas en el brazo, el  grupo muy unido le da su aliento y le recomienda que se vuelva para casa, casquiduro el Perrigalgo quiso continuar pero el brazo pudo más que su moral y media vuelta tuvo que dar.  Pasaron las Minas dirección Arroyomolinos  pero hay que girar a la derecha para coger la cuesta Padre, no antes de que pinchara la burra nueva de Juan Luis Capilla, mientras el pinchazo era subsanado otros muchos fueron a inspeccionar el terreno, descubiendo un mini pozo hecho por enanitos según sus dimensiones.




 Una vez en marcha se pusieron volvieron paisajes bonitos, se empapaban de ellos ya que la cuesta larga y tendida. Pero otro percance en el camino y nueva parada Pablo Carrascosa ha averiado su espada, la culpa la ha tenido un palo en el camino. Subsanada la avería por Javi Viruta en marcha se pusieron y a lo alto de la cuesta Madre llegaron.



 Repusieron fuerzas y una foto se hicieron. Descendieron por la cuesta Madre bien preparado desde la última vez que estuvieron, seguro que algún perrigalgo se quejaría la última vez al dueño y este se la ha arreglado. En la bajada llegan al final  a la puerta el  Burro, llamada así porque el primer día que la subieron había un burro allí.



Todos agrupados cogieron dirección Almoharín tierra de higos, antes de llegar a la casa rural La Atalaya cogieron un camino a la derecha. Campo através pasaron entre medio de la hierba crecidita, buena instantánea saco el fotógrafo del grupo pues unos metros se adelanto para inmortalizar tan bella estampa. Llegaron al canal principal y a la derecha cogieron, buen ritmo llevaron pues de treinta no bajaron. Llegaron al camino Santa Amalia-Almoharín y a la izquierda cogieron hasta llegar al Río Burdalo, junto al 301 la autovía pasaron por debajo y cogieron una alquitranada dirección Santa Amalia llegando al camino de Plaza de Armas y en el pueblo se plantaron y a las doce y media enca Moniato la cerveza se tomaron y la colorin colorado esta es la ruta de unos Perrigalgos que yo he contado.

martes, 14 de mayo de 2013

DIECINUEVE PERRIGALGOS AL CASTILLO DE CORNALVO.


Domingo 12 de mayo de 2013:

Participantes:
Tomas David Casado
Domingo Pablos Junior
Javi Parejo
Diego Parejo
Pedro Cuesta
Isaac García
David Liviano
Lalo Muñoz
Diego Nieto
Juan Nieto
Jorge Flores
Juan Luis Capilla
Pablo Carrascosa
Mario Lozano
José Herrera
Jose Luis Jimenez
Juanma Barroso
Pedro Carrasco
Francisco Mogollón




Crónica Isaac García:
Después de un tiempo jugando al ratón y al gato con el compañero Javi Parejo, encargado de designar cronista en cada etapa, hoy no me escapo, hoy es el día, hoy toca crónica. También he de decir que ya tocaba, así que manos a la obra.
Como cada domingo a las 9:00 de la mañana empiezan a llegar los perrigalgos a su habitual punto de encuentro. Cuando llego ya había un buen grupito, pero todavía no estaba nada claro cual iba a ser la ruta de este domingo. Esto se arregló una vez que llegó Javi y el ya felizmente recuperado Pedro Carrasco, entre ellos y alguno más, en un pis pas decidieron la ruta a hacer, hoy iremos al Castillo de Cornalvo, ¿Castillo en Cornalvo?, en esta peña uno nunca para de sorprenderse y de descubrir nuevos lugares.
Una vez llegaron los últimos rezagados y con el itinerario claro nos ponemos en marcha dirección al Sajonia a un ritmo suave para ir entrando en calor poco a poco, llegamos al canal y seguimos a la izquierda dirección Alico, hoy no toca cuadradillo aunque alguna subida toca seguro. Entramos en la pista alquitranada de Alico y se decide subir al pino por el camino principal en vez de por el camino que sube a la derecha de las casas, ya que según dice algún perrigalgo este no está transitable.


Pues bien, ya tenemos aquí la primera subida del día, que nada tiene que envidiar a la del cuadradillo, cada uno a su ritmo todos la subimos reagrupándonos arriba. Cruzamos la finca de los olivos y llegamos al pino para posteriormente bajar hasta las mesas del capitán y desviarnos dirección las mezquitas.
Bajamos la cuesta de las mezquitas a toda pastilla y cogemos dirección al rugidero, para antes de llegar a la pista que llega al embalse de cornalvo girar a la derecha dirección a la casa de la mezquita, dejando a la izquierda el embalse de las Muelas.

Seguimos por este camino hasta llegar a los pilones donde Mario y Lalo aprovechan un parón para poner a punto los pedales de sus bicis. Una vez resuelto giramos a la izquierda pasando por delante de  la casa vieja de la Mezquita y a unos 600 metros nos encontramos un pequeño regato que vamos cruzando de uno en uno hasta que le toca el turno a Diego Parejo, que llevaba toda la ruta con una cancioncita de su ídolo José Mota… “no puedo pensaaaar, atich atich”, de repente shhhhh, la rueda delantera de su burra le manda callar, ha sufrido un “pequeño pinchazo”. Nos ponemos manos a la obra y descubrimos que el “pequeño pinchazo” resulta ser una raja en la cámara de de 20 centímetros, esto no es un pinchazo es “EL PINCHAZO”. Entre risas y comentarios varios se arregla “EL PINCHAZO” y seguimos adelante con nuestro itinerario.


Pasamos por la casa del Huevo y seguidamente nos adentramos en la finca de El Gamo, donde vemos unos metros más adelante a otros ciclistas de Calamonte, subimos el ritmo de pedaleo y los alcanzamos unos kilómetros más adelante, ellos siguieron con su ruta y nosotros paramos para reagruparnos en un cruce de caminos que resulta ser cuatro caños.



Seguimos a la derecha teniendo que esquivar algún toro que nos encontramos en mitad del camino y por fin, con 32 kilómetros en las piernas, llegamos a nuestro destino, El castillo de Cornalvo. Para llegar hasta el castillo el grupo se divide en dos, aunque al final todos acabamos en el susodicho castillo comiendo nuestros plátanos y barritas energéticas.


Nos hacemos la foto de grupo con el castillo al fondo y de vuelta a casa, que hay que ver a Alonso y Nadal, a ver si nos dan una alegría. Además Juan Luis, el que escribe y alguno más no parábamos de moquear y estornudar por la abundancia de flores que había en los alrededores (que primavera nos espera a los que tenemos alergia…), así que lo dicho, zumbando pal pueblo.


Seguimos dirección a Valdelasyeguas y a los pocos kilómetros tenemos el susto del día, otra vez Pedro Carrasco se va al suelo, (joder al pobre le ha mirado un tuerto… ¡¡ pero muuu tuerto!!), aunque esta vez por suerte sin ninguna consecuencia grave.


Una vez recuperado del susto Pedro, continuamos la marcha hacia los castillejos, sorteando bancos de arena y vacas que se cruzan en nuestro camino, seguimos por el entalle y giramos a la derecha dirección cuadradillo. En este tramo el ritmo del grupo se eleva considerablemente estirándose hasta partirse, más bien desgranarse. Eso si una vez vamos llegando a la pista del canal de Orellana paramos para reagruparnos.

Una vez reagrupados salimos dirección al Sajonia y de ahí hasta el pueblo, a buen ritmo pero sin que el grupo se partiera. Ya en la sede y mientras nos tomamos nuestro refrigerio y degustamos unas riquísimas patatas al alioli preparadas por Mari Carmen, aparecen Beltrán y Tite, este con cara de resaca, y es que la noche no es compatible con la bici.
Pues esto es todo amigos, hasta la próxima.